He buscado la palabra ‘amor’ entre todas las del poema, porque esta obra de Isabel Montero Garrido es un extenso poema ¿Qué obra poética no lo es?, y no la he encontrado. La palabra ‘amor’ no aparece, pero el amor está por todas partes, expresado de formas distintas, amor a la vida, amor al otro, amor propio… expresado en el lenguaje propio de la poeta y del poema.
No puedo omitirlo, he leído las palabras de Isabel Montero Garrido en la entrevista que la autora concede a Chelo de la Torre y no quiero reinterpretarlas, por lo cual os recomiendo su lectura: os servirán de guía y de paso conoceréis mejor a la autora.
Por mi parte, he anotado algunos versos:
era pecho que latía fibras de aire
era tu pelo enredado en mis dedos
y tu boca en el hueco del cuerpo
que sentía quizá versos
era olor que emanabas si buscábamos
a tientas un lugar para beber
***
los sueños que emergen de lo profundo
son los verdaderos sueños
***
supe que un espíritu nuevo
abrazaría mi alma
***
llegaste a mí
no sé bien cómo
Y sí diré que, al leer el poema, lectura que recomiendo encarecidamente, entra uno de lleno en el mundo que la poeta construye, como ese “claro del bosque” que menciona, tan caro a María Zambrano, claro del bosque al que hay que llegar porque señala y explica el acto creativo, la expresión poética como forma de entender y decir el mundo.
Cuentos inacabados 
Deja una respuesta